domingo, 23 de diciembre de 2012

Reencuentros de risas nerviosas, de brillo en los ojos, de abrazos, de labios que se echaban de menos, de latidos que se escuchan con la cabeza en el pecho, de pasión, de empañar los cristales. De pieles que arden. 

domingo, 9 de diciembre de 2012

No puedo evitarlo

No puedo evitar los nervios antes de verlo. No puedo evitar sonreír cuando me saluda. No puedo evitar sentirme morir en cada beso y cada orgasmo, como no puedo evitar echarle de menos cuando nos despedimos.

martes, 30 de octubre de 2012

Melancolía

Y ya no estás, las sábanas se quedaron revueltas, tus cosas desaparecieron y duele. Ya solo quedan viejas colillas en el cenicero y ese lejano olor a tabaco.
Oscuridad, silencio, negro y calor. Calor de piel, calor de tu aliento en mi cuello, calor de tus caricias en mi piel, calor de besos, de saliva, calor de orgasmo. Calor de ti en esta noche de octubre, fría.

lunes, 22 de octubre de 2012

Saliva y besos, y morder y dejarse morder, calor de piel, piel con piel, dulzura, suavidad, frío en los pies, caricias, uñas que se clavan, gemidos por la habitación, perderse en el placer, en la boca, en la piel.

Lunes 6.10

Mañana de lunes. 6.10. Frío y lluvia, y no poder salir de la cama. Un frío que cala, el aullido del viento, el hambre voraz. Hambre que no se sacia con una tostada, hambre de piel. Frío eterno que no se apaga con mantas, frío de tu calor, necesidad de piel, necesidad de saliva. Necesidad de susurros, de suspiros, de gemidos ahogados, de jugar con los dedos, de morder. Frío de un lunes a las 6 y 10 sin ti.
No parar de sentir. Volver a vivir con cada rayo de luz y no dejar que esa luz se apague aunque se baje el interruptor. Sonreír.

jueves, 18 de octubre de 2012

Días de lluvia

Son días en los que despiertas destrozada, con un frío que te hiela la piel, con el viento que aúlla por la persiana, de dolor de cabeza, de fiebre, de no sentir la garganta. Son días de lluvia, días de otoño, de quererse quedar en la cama, de no querer salir, porque a veces es mejor no salir a ver la realidad.

domingo, 30 de septiembre de 2012

Echar de menos

De repente vuelve a ser domingo y vuelvo a alejarme. Me alejo de ti, de las risas que me sacas, de los susurros, de los besos robados, de los abrazos en silencio, de las palabras mudas. Y llega el momento de despedirse, de abrazos eternos, de caricias y de lágrimas. Y en la soledad de esta noche de final de septiembre, en la oscuridad de este cuarto, te echo de menos y duele.

lunes, 24 de septiembre de 2012

Mudanzas

Y ella habló, pero con una voz distinta, como si se hubiese tragado la luz de otro lugar.

jueves, 20 de septiembre de 2012

Luz

Luz. Abrir los ojos cada mañana y luz que se filtra por la persiana. Luz. Levantar esa persiana y luz que ciega los ojos. Luz. Salir de casa y luz de sol que lucha contra nubes esponjosas como algodón de azúcar. Luz. Estar encerrada tras las rejas de una ventana, y luz que alegra mañanas. Luz, la que se filtra por los visillos durante la siesta. Luz de media tarde. Luz rojiza de atardeceres de otoño. Luz de otoño que atraviesa las hojas, que se refleja en el río. Luz, luz de estrellas que iluminan este amor y luz que juega con mi cámara al escondite.


martes, 21 de agosto de 2012

Alegoría

Una casa antigua, encalada, andaluza, con su patio lleno de flores ya marchitas, y el susurro olvidado de un agua que ya no corre. Dentro, una habitación oscura, de techos infinitos y ventanas tapiadas por las que la luz no puede pasar. Y en una esquina, en una silla vieja sentada, una mujer. El pelo oscuro, lacio, le cae sobre los ojos. Unos ojos que derraman lágrimas, que miran al suelo y a las paredes. Unos labios, antaño claveles, ahora marchitos, se mueven inútilmente buscando pronunciar palabras que quedarán para siempre, encarceladas tras muros bañados en cal.

martes, 14 de agosto de 2012

Sentimientos encontrados

A veces te pones a recordar y no puedes evitar lágrimas. ¿Lágrimas de felicidad? De felicidad, de melancolía, de echar de menos lo que has perdido, lo que está lejos... Lágrimas de odiar lo que te rodea, los desdenes de los demás, cada puñalada por la espalda, cada olvido malintencionado o no, cada palabra de burla y cada gesto. Por mí podéis iros todos a la mierda, pues solo los recuerdos merecen lágrimas.

domingo, 5 de agosto de 2012

Silencio

Las lágrimas van recorriendo esa cama de sábanas rojas como si fuesen un río. En sus orillas, sábanas amontonadas por el calor de un cuerpo que no soporta su peso. Unos primeros rayos de luz que se filtran por la ventana empiezan a llenar de luz el río, y el calor de un verano sofocante, a secarlo. Cuando se despertó no quedaba rastro visible de aquellas lágrimas derramadas, solo un profundo vacío, y silencio.
En sus ojos vivían diez mil luceros y cuando lloraban, pedían las niñas deseos buscando la suerte en esa lluvia de estrellas.
En sus ojos vivían diez mil luceros y cuando lloraban, pedían las niñas deseos buscando la suerte en esa lluvia de estrellas.

viernes, 3 de agosto de 2012

Metamorfosis

De tanto desear que llegara la primavera, sus pies se tornaron raíces y de su boca, en vez de suspiros, solo salían mariposas. Y tanta tristeza le dio el no poder moverse, que empezó a desear el otoño, y así, se fue cayendo su pelo y fueron muriendo las mariposas. Tras meses sintiéndose sola, un día sus labios se marchitaron y el árbol hizo un ruido seco al caer que nadie pudo oír.

lunes, 30 de julio de 2012

NOSTALGIA

Nostalgia de turquesa y de blanco. Nostalgia de arena y de sal. Nostalgia de olas y de levante, de arena blanca y de pescaíto frito. Nostalgia del sol en la cara, nostalgia de esa luz que ciega. Nostalgia de un agua helada.Nostalgia de conchas que se hincan en los dedos. Nostalgia de mar. Nostalgia de azul.

martes, 10 de julio de 2012

Muérdeme despacito, lléname los labios con tu saliva, mátame poco a poco. Desbócate conmigo, gime en mi oído, recorre mi piel con tu lengua. Y mírame a los ojos y susúrrame "mátame ahora a mí". 



sábado, 30 de junio de 2012

Una semana en el motor de un autobús. (Por Pedro José López Rodríguez)

Con este disco, Los Planetas se consagran como mejor grupo del panorama musical español, al mismo nivel o por encima, de cualquier grupo que exista en este planeta. Si en sus dos primeros discos nos dieron muestras de que estos chicos venían para marcar un antes y un después en la música, con este LP lo han conseguido. Los Planetas no serán un grupo de mucho tirón comercial, pero son fieles a su estilo y eso es lo que los hace ser un grupo auténtico y bastante “sibara”, de los que hoy en día no se ven…
Una Semana En El Motor De Un Autobús es un disco conceptual que parece narrar la historia de un “chavea” que lo ha pasado mal por una chica, y se encierra en un infierno de dolor y sufrimiento, que la única forma de aliviarlo es con veneno blanco en formas de aristas. Pero según avanza el disco, finalmente parece encontrar el camino para llegar a la felicidad. La carátula del disco parece advertirnos del peligro de escuchar el disco (como los botes de lejías que traen un símbolo parecido), que su uso es nocivo.
Es un disco tan cercano y directo, que seguro que más de un adolescente una vez que lo escuche se sentirá identificado con él. Las letras de Jota, aquellas que parecen estar al alcance de cualquier persona, pero que sólo están al alcance de él, son verdaderas obras de arte, que van flotando entre guitarras psicodélicas y arreglos de cuerdas que van siendo marcadas por unos golpes de batería espectaculares, que hacen que uno entre en el disco como protagonista de la historia.
Que podemos decir de Segundo Premio, posiblemente el himno de este disco, cuyo último párrafo (Y si esto te hace daño, si te puedo hacer sufrir, ha servido para algo,  al menos para mí) habrá sido cantado en forma de delirio después de una noche de borrachera en dirección a casa por infinidad de chavales dolidos y marcados por una relación (Recuerdo que en mi piso de estudiante, en la pared tenía pegado un cartel con ese párrafo). Mediante aullidos de lobos, llegamos a otro de los grandes hits del disco, Desaparecer, donde Jota exclama su dolor en forma de odio y rencor, soñando con la desaparición de esa persona (Y ¿qué vas a ofrecer? Si lo que antes te sirvió, no tiene ya ningún valor. Si te esfuerzas puedes desaparecer…)
(Y pensaba en destrozarte todo el tiempo…), La Playa, ¿Quién no ha pasado por un verano así? En la primera parte del disco se narra esa tormentosa relación que lleva al sufrimiento al protagonista, hasta el punto de recurrir a las drogas. Temas como Laboratorio Mágico (Estoy seguro, tiene haber algo que me ayude a soportarlo. En las farmacias del espacio, en un laboratorio mágico…); Cumpleaños Total (Y aunque juré que nunca más, me acerco hasta el servicio a que me pongan otra…), gran tema pegadizo que nunca falta en cualquier “bareto”; Línea 1 (Y después pensé: ¡mejor que no! y puse la televisión. Subí a pillar un poco más, después de todo esto no está mal…), es mi tema favorito del disco (recuerdo que en mi habitación de estudiante tenía un cartel con esa canción pegada al lado de mi cama), es un tema muy duro, en el que el “joven” intenta empezar con una nueva vida, y dejar todo esa “mierda” ya, pero no lo consigue…
            Y llegamos al final del disco con La Copa De Europa, un tema que más de una vez ha hecho que se me salten las lágrimas, un canción de 09:31 minutos excelentes, antológicos, poderosos, triunfantes… con esos violines, esas guitarras, esa batería que va subiendo hasta que finalmente llega al clímax con esa voz de Jota que parece gritar dentro de nuestros corazones… Jota con esta canción parece decirnos que ha encontrado la manera de llegar a la felicidad y que hay que seguir luchando (Cuánto tiempo he perdido ahí fuera, cuanto por descubrir en mi cabeza…)
            Una Semana En El Motor De Un Autobús, es una obra de arte que recomiendo a todo joven, un disco que me ha ayudado mucho en momentos difíciles de mi vida, no tengo palabras para describir lo que este disco ha significado para mí, y eso es lo bonito de la música, que te ayude y te haga sentir cosas. Nunca olvidaré el cumpleaños en el que mis amigos me regalaron el disco… Gracias Jota.
http://www.priceminister.es/nav/Musica_CD/f3/pop-rock-espanol



martes, 26 de junio de 2012

Las notas que te arañan los labios

Se empiezan a mover los dedos, suenan los acordes de ese ukelele, el sol me acaricia la cara y la brisa me agita el pelo. Se mueven los labios, y puedo ver las notas musicales ir saliendo de tu garganta y escaparse por ellos. Arañan cada centímetro de tu boca, queriendo quedarse, queriendo jugar con tu lengua, y luego viajan por el aire, buscando esos oídos que solo ansían escucharlas. 


jueves, 21 de junio de 2012

Reencuentros

Son cuerpos cansados de echar de menos que se funden en abrazos que envidian hasta las raíces de los robles. Son besos dulces de labios sedientos de saliva. Son minutos que se los lleva el levante que sopla con fuerza y nosotros solo buscamos esconder el tiempo en nuestros bolsillos para que no se escape. Son sonrisas bañadas de rayos de luz que arañan el horizonte temiendo la oscuridad. Son reencuentros que saben a poco.


miércoles, 20 de junio de 2012

Y tú no estás

Esta noche me falta el aire, la angustia me oprime el pecho y tú no estás aquí para calmarme. Es ya casi verano y yo me estoy helando de frío aun estando tapada por estas sábanas rojas, y tú no estás aquí para arroparme. Los ojos se vuelven rojos y las lágrimas resbalan por mis mejillas, y tú no estás aquí para secarlas. ¿Por qué no estás? Vuelve, por favor, porque si no lo haces, te mato.



miércoles, 13 de junio de 2012

Caminos y caídas

Estas lágrimas no son de felicidad por haber acabado al fin, son el dolor de tantos rechazos, de tantos desprecios, de tantas veces que me he sentido sola, de todas esas veces que caminaba por un camino pedregoso sin nadie que me ayudase. Pero también son lágrimas de orgullo porque en cada caída, supe poner las manos en el suelo, tomar impulso y volver a levantarme, aunque ninguno estuviéseis ahí.

martes, 12 de junio de 2012

Noches

Son noches de no poder dormir, de que las sábanas estorben y de que agobie el calor. Noches de sentirse extraña, de sentir que no eres tú mismo, de querer abrirse el pecho y buscarse dentro. Noches de un nudo en la garganta y de sentir como la oscuridad te va tragando poco a poco.

domingo, 10 de junio de 2012

Con el mundo bajo los pies

Allí sentados, con el mundo a nuestros pies, nos decimos secretos al oído y nos cantamos palabras de amor. Nos regalamos besos y caricias mientras vemos el sol morir. El atardecer se refleja en tu pelo y en mis ojos cuando nos miramos fijamente agarrándonos las manos con fuerza. Dicen las gitanas que algunas flores se marchitan, vemos con nuestros ojos como la luz del sol va muriendo. Quizás esta vez estamos regando bien la flor. Quizás esta vez la luz la llevamos dentro y ahí aún no ha encontrado horizontes que la escondan.


viernes, 8 de junio de 2012

Noches difíciles

Ha sido una noche horrible, de insomnio, pesadillas y monstruos. Y ahora estoy sola en esta cama, con los pies y el corazón helados.

jueves, 7 de junio de 2012

Mi botella de cristal

Son sonrisas, risas, carcajadas. Ojos tristes, lágrimas que forman charcos. Son abrazos, caricias, besos. Son recuerdos guardados en una botella de cristal que teme caer y romperse.

miércoles, 6 de junio de 2012

Odio saber que

Odio saber que algo te hace daño. Odio saber que no ríes, que tus ojos están tristes, que las lágrimas resbalan por tus mejillas. No estés ahí tan solo. Ven aquí y deja que te abrace y te diga tonterías para hacerte sonreír. Que si lloras, quiero beberme tus lágrimas.

martes, 5 de junio de 2012

¿Jugamos?

Hay momentos en los que dejamos de un lado el romanticismo y todo es pasión. Sobra la ropa y podemos sentir nuestras pieles. Noto tu aliento en mi cuello y tus dedos explorando mi cuerpo. Se escuchan jadeos y entre gemidos la habitación se inunda de olor a sexo. Y cuando acabamos, nos acurrucamos entre esas sábanas que huelen a suavizante. Entre caricias nos vamos durmiendo, yo con la cabeza apoyada en tu pecho, para por la mañana, cuando el sol se filtra por la persiana, morderte en el labio y susurrarte "¿Jugamos?"


Y que te rías de mis pecas

Te echo de menos. Sí, me faltas, me faltas a cada instante. Necesito tus abrazos cuando estoy seria, tus tonterías que me hacen sonreír, tus caricias. Necesito que me acaricies la nariz y te rías de mis pecas, que pases tus dedos por mis labios y luego los beses con dulzura. Necesito de ti, y lo necesito ahora.


lunes, 4 de junio de 2012

Déjame morderte

Déjame que te muerda, que mis dientes se claven en tu piel, que te hagan arañones. Déjame pasar mi lengua por cada poro, saborear cada milímetro, que mi saliva te cubra. Déjame que te muerda hasta que te quejes porque duele y muérdeme para que ahora pueda quejarme yo.


domingo, 3 de junio de 2012

Arena y rojo

Un día en la playa, luz que ciega, la sal en la piel y arena entre los dedos. El sonido del mar me arrulla poco a poco mientras va atardeciendo. En esta soledad, las olas se van tragando toda la luz, que roja y anaranjada se refleja en el mar e ilumina toda la orilla. En esta soledad te echo de menos. Mientras la espuma me moja los pies, yo solo deseo ver morir el sol contigo una vez más.

sábado, 2 de junio de 2012

Lejía

En cada esquina corazones pintados en paredes encaladas, iniciales en cortezas de árbol que se creen eternas, letras a rotulador en puertas de servicios. Pintados pensados para durar siempre, estropeando la vista para amores que se apagan en dos soplidos de vela. Nosotros no necesitamos escribir nada, quizás porque esto no se va con lejía y agua.

Charcos


Una punzada y ese sol cegador se apaga poco a poco. Se nubla la vista y se humedecen los ojos y el pecho me escuece de angustia. El blanco de los ojos se vuelve rojo y las lágrimas resbalan por las mejillas. Caen al suelo y se confuden con las gotas de lluvia, y van calle a bajo formando charcos de dolor.


viernes, 1 de junio de 2012

Frío

Desnuda en esta cama que se me antoja gigantesca, busco las caricias de tus dedos, y lo único que encuentro son sábanas tan frías como témpanos de hielo.

miércoles, 30 de mayo de 2012

Elefantes bajo sombreros

Cuando somos niños vemos las cosas de otra manera. Quizás sea porque estamos más cerca del suelo, todo parece más grande, y apreciamos las cosas pequeñas. Pero poco a poco crecemos, y nos alejamos del asfalto, y nuestros pies los vemos lejanos, pero apenas vemos más allá de nuestras narices. Creemos que esas florecillas que nacen de entre las rajas de las paredes, que esos rayos de sol que luchan contra las nubes en días oscuros, que los charcos que antes pisábamos con alegría, son tan insignificantes que no merece la pena ni mirarlos. Nunca dejes que los años te cieguen, nunca dejes que los años te hagan dejar de apreciar la belleza de las cosas pequeñas, nunca dejes que te escondan elefantes bajo sombreros.

La vela


La única luz era la de una vela. Se iba extinguiendo poco a poco. Ellos se miraban a los ojos, que reflejaban llamas, de la vela y de pasión. A cada beso, una caricia, y a cada caricia, un beso. Pero se abrió la puerta, y la vela cayó al suelo, y ardió todo, y ardía la pasión.




Andalucía


Olor a azahar y a incienso y a castañas
y sonido de palmas y de cantes
y de movimiento de volantes
y de bailes de tacones.
Tardes de luz y alegría,
noches de estrellas y jazmín.
Paredes encaladas
y piedras mozárabes bajo los pies.
Charlas al fresco en verano,
risas cálidas en las noches frías de invierno.
Patios llenos de flores
donde el agua refleja el sol.
Y risas, y acordes de guitarra tras cada reja.  

martes, 29 de mayo de 2012

Mariposas

Y a cada palabra se escapaban de su boca mariposas, y temiendo ella que la luz del sol las cegara, empezó a besarle ansiosamente guardando cada mariposa dentro de sí, donde la oscuridad aún podría esconderlas, para que cuando llegase la noche, abriendo sus ojos, salieran de nuevo y se convirtieran en estrellas.

lunes, 28 de mayo de 2012

Mis monstruos

Ha sido una noche extraña, de pesadillas y sueños angustiosos. Me acurruco entre las sábanas escondiéndome de los monstruos de mi imaginación. Y entonces, un sonido vibrante y horrible. Ya es la hora de salir de la cama, vestirse, desayunar y la misma rutina de cada día. Ahora sí que me escondo bajo las sábanas, la angustia vuelve a mi alma rota, y el miedo, la diferencia es que a esos monstruos no los despisto bajo una manta.

¡Desbócate conmigo!

Una cama ansiosa, y dos amantes que se desean, la ropa que sobra, la piel que suda, una caricia y el estremecerse, y labios húmedos, las lenguas que se bailan, las uñas que se hincan en la piel, y arañan, y dejan marcas, y duelen, y la vuelta al placer, al desboque, a nuestra locura.

domingo, 27 de mayo de 2012

Lágrimas

Dolor en cada gesto, cada palabra de reproche, dolor en cada risotada, en cada burla, dolor en cada desprecio, en cada mueca de asco. Dolor por cada vez que dijiste que todo lo que hacía lo hacía mal. Dolor por cada vez que tiraste y perdiste mis regalos. Dolor por las veces que no te preocupaste por si me molestaron tus palabras. Dolor en cada lágrima que me hiciste derramar aun siendo mi madre.

Arena y sol

Ese aire caliente que anuncia ya el verano, y el olor a mar, y la arena blanca entre los dedos. Mis pies hundiéndose y marcando mis pasos, las conchas que se clavan en las plantas, la brisa que alborota mi pelo, y el mar se me refleja en los ojos. Me acerco y el agua helada me hace estremecer. Poco a poco voy avanzando y las olas me acarician cada trozo de la piel. Y un dolor agudo, y sangre en el pie, y el agua helada, y el sol bañándome. El primer día de playa.

sábado, 26 de mayo de 2012

Un cuento

Un camino tan largo por delante, y demasiadas piedras en él. Un camino desértico, agobiante, donde no veo más que arena y rocas, rocas con las que tropiezo y me levanto con heridas sangrantes dificiles de cicatrizar. Pero un día, caminando cabizbaja como siempre, escuché el correr del agua. Y allí enfrente mía, encontré un lago. Un lago grandioso, de agua cristalina. En él podía ver mi reflejo, hermoso y perfecto a mis ojos. Tantos pasos, tantas caídas, tantas heridas, me habían dado una sed terrible, y al fin estaba él allí para calmar mi sed. Y me agaché y bebí y bebí sin descanso durante días hasta que me di por satisfecha. Me levanté del suelo y me alejé del lago. Mis pies ya no estaban cansados ni doloridos de andar, mis heridas ya no sangraban.. Pero apenas había dado unos pasos y volvía a tener sed, y regresé al lago. Y desde entonces no he podido alejarme de ese lago, el único que era capaz de calmar mi sed y curar mis heridas, el lago cristalino que había visto tantas veces en sueños, ideal y bello... Y ahora lo había encontrado en mi camino y ni él quería dejarme ir ni yo quería dejarlo pasar. Quizás tenía que encontrar ese lago, quizás él tenía que atraparme a mí. Pero ahora estoy frente a él y es el mejor néctar, y es el único capaz de absorber la sangre de tantas y tantas heridas...

jueves, 24 de mayo de 2012

¡Sácame de aquí!

Intento escribiros algo y no lo consigo. Está de nuevo esta sensación que me bloquea. La misma de cada mañana cuando, tras extrañas pesadillas y desvelos, me hace sentirme frente a un abismo. Entre la oscuridad, ese timbre irritante del reloj busca despertarme, pero yo no puedo salir de la cama. Quiero esconderme debajo de las sábanas, que esa angustia se quede solo en mis sueños. Quiero no tener miedo a calzarme los zapatos cada día, a salir de casa aunque haga frío, a saludar a todos con una sonrisa. A veces desearía volver a ser esa niña que cada mañana, hiciera sol o lloviese, se levantaba de la cama temprano, corría a la cama de sus padres y los despertaba con un "venga, arriba, que se hace tarde".

El reloj

Y al abrir él sus ojos marrones, el reloj dio medianoche, y el soldado de plomo se giró, lo miró fijamente y se los volvió a cerrar, apagando la única luz del salón.

miércoles, 23 de mayo de 2012

Entre las sábanas

El ambiente está cargado, la habitación huele a sexo, los cuerpos se desean y las pieles arden. Escondidos entre las sábanas nos susurramos al oído sentimientos prohibidos. Nuestras lenguas se funden en besos clandestinos. Tu saliva es mi néctar y tus manos mi locura. Cántame bajito gemidos inaudibles, pasa tus dedos por mi piel, juguemos a contar lunares. Déjame beber de tu cuerpo hasta saciarme y no me digas que pare. Deja que la noche sea eterna, que tus dedos bailen en mi entrepierna, no pienses en nada. Que todo sea pasión en esta oscuridad que no cesa



lunes, 21 de mayo de 2012

Bajo el paraguas rosa

Llueve. Huele a tierra mojada. Vaya olor tan maravilloso, ¿no? Y camino pisando los charcos y salpicándome los zapatos. El sonido de las gotas repiqueteando en mi paraguas me relaja. Tengo la mano helada de sostener el paraguas y de que aire y la lluvia ataque su piel. Pero ya no camino sola, ahora debajo de este paraguas estás tú. Tú, con tus risas que son tan alegres como el agua que riega los campos, con tus abrazos que son el mejor abrigo para mi piel, con tus besos que son el néctar que me cura la sed. Esta lluvia nos quiere. Le gusta vernos caminar y chapotear en los charcos. Le gustan nuestros besos furtivos debajo de ese paraguas rosa. Le encanta que nuestras manos se unan para calmar el frío de la piel. Ya las gotas que resbalan por mis mejillas no son lágrimas, son gotitas de lluvia, esa lluvia que nos ama, que nos da vida, que me inunda el corazón de alegría. Esa alegría que solo me das tú.

sábado, 19 de mayo de 2012

No pienses 2

Recuerdos, la lluvia, el viento golpeando la persiana, el canturreo de los pájaros, mi cama sigue vacía, un coche arranca, y te echo de menos. Una cama inmensa, una cabeza turbada, recuerdos dolorosos, melancolía de lluvia tras los cristales, errores, una piel que arde, y los pajarillos siguen con su canturreo, y mi cama vacía, esperando.

miércoles, 16 de mayo de 2012

No pienses

Un camino dorado, y un puente viejo, y unas botas rojas, y los charcos, y un paraguas azul, y una acera, y amarillo, y una puerta, y un árbol grande, muerte, silencio, melodía de un piano blanco de cola, bandejas, espejos, reflejos, ojos castaños, pestañas húmedas por las lágrimas, labios secos por el viento, uñas resquebrajadas, azul, las nubes, el mar, la sal, la arena, los pies, la piel ardiente, hielo y el frío.

Pero ya todo eso no me importa

Es un día horrible. El viento sopla feroz y arrastra las nubes que esconden el sol. Pero ya todo eso no me importa. La piedra sobre la que estamos sentados está dura y helada y el aire frío martiriza mis labios. Pero ya todo eso no me importa. Huele a lluvia y se oyen tormentas a los lejos. Pero ya todo eso no me importa. Me miras y veo alegría en tus ojos. El sonido de tu risa es como la corriente de un río, fuerte y desbocado. Los pajaros revolotean sobre las margaritas y miran sus reflejos en el agua e hinchan sus buches orgullosos. Me coges la mano y aprietas con fuerza, como si fueras ese sol, que no quiere quiere morir enterrado por las nubes.

El agua de mi desierto

Es sonrisas cuando hay oscuridad, el sol que lucha contra las nubes que me turban, el viento que las hace desaparecer. Es caricias soleadas, la hierba que te pincha la ropa, reflejos dorados sobre agua estancada y sucia, es amapolas entre el trigo verde, golondrinas en un día de lluvia. Es paseos bajo el sol y abrazos eternos bajo la luna. Es esos besos de tabaco y esa saliva que es agua en el desierto.

sábado, 5 de mayo de 2012

Una búsqueda inútil

Por más que te busco no te encuentro. ¡Qué búsqueda tan larga! Te busco por todos los sitios, en cada esquina, en cada gota de lluvia, en cada rayo de sol, en cada brisa que me revuelve el pelo, en cada reflejo en los charcos, en mis sábanas, y no estás, sigues sin estar. Salgo de casa, camino por la calle, ya no llevo la vista fija en el suelo, miro a mi alrededor, te busco desesperada, pero tu te escondes a mis manos. En casa abro las ventanas y las puertas para dejarte entrar pero tu odias este olor a fracaso. Ni la música consigue atraerte, ni los más bellos acordes, ni esas letras que desgarran el alma, pero a ti ya no te desgarran, ya no sientes igual que antes, ya no te gusto, ahora me desprecias y dejas mis bolígrafos llenos de tinta y las hojas vacías. Mis manos quieren oler a tinta seca y mis dedos quieren volver a sentir el papel en la piel. Quiero dedos azules y olor a sentimientos en cada cuaderno. ¿Por qué me rechazas? ¿Por qué estás asqueada de mí? ¿Por qué te molesta mi presencia? Te necesito de vuelta, porque no quiero estar más encerrada, porque mi alma necesita salir de su cárcel, porque quiero sentir tu cosquilleo recorriendo mi cuerpo hasta las yemas de mis dedos y traspasar mis uñas, y llegar al papel.

jueves, 12 de abril de 2012

Encerrada bajo llave


Me asomo por la ventana y llueve fuera, los goterones golpean el alféizar y solo es escuchan pasos lejanos chapotear en los charcos y las ruedas sobre el alquitrán húmedo ¿y no es verdad que dentro de mí llueve con más fuerza? La abro y dejo que una fresca brisa llene la habitación, que lleva meses inundada por un aire que asfixia y agobia. El Dylan que suena en mi radio canta sobre bailar sobre un cielo de diamantes y en mi cielo solo veo nubes y más nubes. Me siento en el suelo, a mi alrededor solo hay hojas arrugadas y destrozadas de ese viejo cuaderno, el bolígrafo apenas tiene tinta y sin embargo, no he podido escribir nada. ¿Dónde te has ido? ¿Tanto te ha irritado la vida que llevo ahora? Ya no fluyes de mi cabeza a mis manos como un rayo ansiosa de plasmar en el papel todo eso que pasa por mi mente, todos esos pensamientos que nublan mi frente, que iluminan mis ojos o acaso esos que fruncen mi ceño.  La lluvia está harta de no ser protagonista de mis relatos, los libros de mi estantería tienen celos de esos acordes de guitarra que son lo único con lo que puedo disfrutar, mis dedos ansían poder volver a llenarse de tinta. Echo de menos todas esas tardes en las que la luz traspasaba el cuaderno que ahora está guardado dentro de ese cajón bajo llave. Te echo de menos a ti, ¡vuelve! Que estos sentimientos no desean pasar más tiempo encerrados, quieren volver a llenar hojas, quieren gastar bolígrafos, quieren ser releídos mil y una vez. Devuelve la vista a mis ojos ya ciegos y cansados de tanta angustia, déjame volver a mirar como un niño, volver a soñar con lugares exóticos, vuelve a anidar en una piel que te añora y en una cabeza que sólo espera tu presencia, y es que es contigo, con la única que puedo yo curar esta locura porque ya ni esta brisa ni esos acordes de harmónica ayudan. 

miércoles, 4 de abril de 2012

El sol que se esconde tras las nubes

Hace un viento que dificulta el andar, y el frío me hiela la nariz. El cielo, encapotado, deja entrever a ratos un sol que apenas calienta. Paseo contigo por calles casi vacías donde lo único que se oye es el viento que sopla fuerte y las ruedas de los coches que pasan a toda velocidad. No podemos parar de charlar, son tantas cosas que no nos hemos contado... Han sido días tristes para mí y al fin alguien consigue hacerme sonreír. Mis ojos lucen más alegres y las risas flotan en el aire. El mal tiempo que antes me agobiaba se me antoja un ambiente ideal comparado con las cuatro paredes de mi habitación. Llegamos a un sitio tranquilo, rodeado de naturaleza, mi mente ya no está turbada, todo se me pasa con el sol que asoma por las nubes, el movimiento del agua y el aleteo de las golondrinas. Hablamos de tonterías y me sacas risas a montones. Y es que después de pasar ratitos contigo, olvido mis problemas, desaparecen las nubes de mi cabeza y ya mis ojos se iluminan con la luz del sol que se esconde tras las nubes. 


lunes, 26 de marzo de 2012

No más dolor....

En la oscuridad
pensando en silencio
ya con los ojos enrojecidos
y las mejillas ardiendo.

Un vago rumor de música
sonando entre las sombras
pero ya no recuerdo ninguna letra.

Todos esos recuerdos me inundan
y se me parte el alma en dos
tantos momentos
tantas sonrisas
y también muchas lágrimas.

Pero ya el dolor es demasiado insoportable
me va comiendo por dentro
como un horrible monstruo de dientes
y garras afiladas
y yo ya no quiero más dolor
¡No quiero más dolor!

domingo, 18 de marzo de 2012

Pasear a tu vera

Quiero pasear contigo por ese sendero
disfrutar del sol y de tu compañía
que no me falten tus abrazos ni el olor de las flores
que me cojas la mano y no la sueltes.
Poder sentir el aire fresco en la cara
que nos revuelva el pelo.
Y ya luego, cansados de tantos y tantos pasos
sentarnos en la hierba, mirarnos a los ojos
y llenarnos de besos.
Tendernos en la hierba, que nos pinche la piel dulcemente,
y que nos colmemos de caricias
y descansar sobre tu pecho
                                                                                    hasta que lleguen las estrellas.

lunes, 12 de marzo de 2012

La ciudad muerta

La ciudad muerta de aceras grises
de edificios sombríos, de olores pestilentes
que emergen del suelo, de las alcantarillas,
 de los corazones de aquellos que están huecos y podridos por dentro.
Los sueños rotos, destrozados al caer por las ventanas.
Los suspiros perdidos que se confunden con el humo de las fábricas.
El sol que apenas consigue brillar
que se oculta, que se desvanece, que desaparece,
como la ilusión de los que caminan a la sombra de los edificios,
grises, sombríos, vacíos…
Y anochece, y ni siquiera se pueden ver las estrellas,
esa farola es la única luz, esa luz que nunca se apaga,
esos débiles acordes de guitarra,  que luchan por volver a ser escuchados.


Las hojas de ese cuaderno

Sentada en el suelo
con Smith sonando de fondo
un cuaderno sobre las rodillas,
un bolígrafo en las manos.
Hojas arrugadas, estrujadas,
en el suelo,
frío, muerto…
Y cierro los ojos
y vuelvo a estar allí,
sentada frente al río
aquella tarde de mayo.
La luz lo baña todo,
el agua brilla y reluce llena de vida
y el sol me acaricia la cara
y me duerme,
puedo sentir la hierba
puntiaguda, pinchando mi cuerpo al tenderme.
Y no existe nada más,
nada aparte de ese sol
de esa sensación de libertad
de que las preocupaciones
se las lleva la corriente
y que el agua solo refleja
esa luz,
que brilla, que da esperanza,
que nunca se apaga.
Y entonces abro los ojos,
y vuelvo a estar aquí,
con mismo cuaderno sobre las manos
y las mismas hojas en blanco
vacías
y muertas.

viernes, 27 de enero de 2012

Gotas que resbalan

Sentada frente a la ventana ves como las gotas empiezan a mojar el cristal. Decido salir de casa y dejar que las gotas de lluvia caigan sobre mí, sobre mis brazos, mi cara ... Me siento en la puerta y me pongo a leer un libro mientras oigo como el sonido de las gotas golpeando el asfalto repiquetea en mis oídos. Y al cabo de un rato, comienza ese maravilloso olor, el olor de la tierra mojada que inunda tu interior y te hace sentir tan en unión con la naturaleza. Me levanto, cojo un paraguas y salgo a pasear. Mis zapatos pisan los charcos con ese divertido chapoteo que moja mis botas. Las miro y allí esta mi reflejo, devolviéndome la mirada desde el agua fría del mes de enero. Y entonces aparto el paraguas y dejo que las gotas caigan sobre mi cara, que resbalen por mi nariz...

viernes, 6 de enero de 2012

Tristezas de un día de enero

Sabes que el día irá mal cuando escuchas a toda tu familia reír en el piso de arriba y tu ni siquiera puedes levantarte de la cama. Sientes dolor y no es solo físico. Prefieres quedarte a oscuras, con la manta hasta las cejas sin hablar con nadie, sin que nadie mire y vea que tus ojos están tristes. Y entonces, pasas el día en frente de la televisión, sola, mirándola pero sin ver nada. Y sigues oyendo a los niños jugar en la calle, con esos regalos, emocionados, riendo a carcajadas y tú sintiéndote más sola que nunca. Te encierras en tu habitación, a oscuras, te pones los cascos y la música a todo volumen para no poder ni escuchar tus pensamientos. Esos pensamientos que te van comiendo por dentro, destrozándote...

martes, 3 de enero de 2012

Letras en la piel y brillo en los ojos

Es 30 de diciembre de 2011 y hoy toca grabar un vídeo con unas amigas que me van a ayudar. No tengo muy claro lo que quiero hacer, algunas ideas pasan por mi mente, pero no hay nada claro, ya irá saliendo. Decidimos bajar a la verbena y grabar algunas tomas para las que necesito pintarme los pies y las manos. Me descalzo y mis amigas me empiezan a pintar los pies y entonces el rotulador empieza a rozar mi piel y a llenarla de letras de canciones, frases de un libro que llevaba en el bolso, cosas que se nos pasan por la cabeza... Y en unos minutos decenas de letras cubren mis pies. Entonces toca empezar a grabar. Me pongo de pie y siento el frío de las piedras en mis huesos. Las tomas deben ser de mis pies andando descalzos sobre hojas secas. Hojas que cuando las piso crujen y puedo sentir esa vida ya muerta en mi piel. Acabamos esas tomas y subimos al Casco Antiguo, llegamos al balcón pero ya es de noche y es imposible grabar nada. Me asomo el balcón y veo miles de luces de todos los colores a mis pies, y elevo la mirada, sobre mí un oscuro cielo estrellado y ante mis ojos, la luna blanca y redonda alumbrando mi cara, mis ojos...