La vela
La única luz era la de una vela. Se iba extinguiendo poco a poco. Ellos se miraban a los ojos, que reflejaban llamas, de la vela y de pasión. A cada beso, una caricia, y a cada caricia, un beso. Pero se abrió la puerta, y la vela cayó al suelo, y ardió todo, y ardía la pasión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario